«Nito Cortizo, el peor presidente que ha tenido Panamá», gritaban los jóvenes en la calle 50. Sin embargo, como dice el versículo bíblico de Romanos 8:28, «Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.»

En medio de la desilusión generada por la gestión del presidente Laurentino «Nito» Cortizo, surgió un fenómeno inesperado. Esta crisis no solo resaltó las fallas gubernamentales, sino que también avivó el sentimiento nacionalista entre los jóvenes panameños. Criticados previamente por su aparente indiferencia a los problemas nacionales mientras navegaban en sus dispositivos móviles, ahora se encuentran unidos en protesta.

El ejecutivo, respaldado por el órgano legislativo, aprobó la polémica Ley 406 de 2023 del contrato minero. En respuesta, diversas organizaciones en Panamá, entre ellas queremos destacar dos agrupaciones básicamente de jóvenes como los estudiantes universitarios y el movimiento «Sal de las Redes», exigieron la derogación de esta ley que permitía el contrato con la empresa minera.

Los estudiantes universitarios, que convirtieron el campus en su cuartel central durante más de un mes, desafiaron la crisis minera con una lucha incansable las 24 horas del día, los 7 días de la semana. La prueba más contundente de su compromiso fue el cierre constante de la Vía Transístmica a lo largo de todo el conflicto.

Por otro lado, el movimiento «Sal de las Redes», que encontró su bastión en la Cinta Costera y Calle 50, se manifestó vigorosamente contra la Ley 406 del 20 de octubre de 2023.

La participación valiente y fundamental de la juventud panameña en esta crisis nacional no debe pasarse por alto. A lo largo de la lucha, se sumaron a la causa grupos originarios y educadores, marcando así un capítulo histórico en la resistencia del pueblo panameño ante las decisiones gubernamentales controvertidas.

No podemos dejar de mencionar igualmente el histórico papel jugado por el Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares (SUNTRACS), que hasta sus cuentas bancarias lo cancelaron para disminuir su capacidad de lucha en esta crisis.

La energía y la unidad demostradas por la juventud han sido clave para desafiar el statu quo y recordarle al país que la voz de la juventud no puede ser ignorada.

Por: Alfredo Meléndez Moulton

Fotos: Félix Villarreal /  Edward Ley Ortiz (portada) .

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