Bajo la directriz del rector Dr. Eduardo Flores Castro, la Universidad de Panamá se movilizó durante dos meses y medio para coordinar una jornada médica en la comunidad de San Benito. Esta iniciativa fue impulsada en respuesta a la solicitud del rector de presentar propuestas de proyectos para las comunidades circundantes a la mina.

La Universidad de Panamá ha desplegado esfuerzos durante los últimos dos meses y medio para organizar y llevar a cabo una jornada médica en la comunidad de San Benito, en cumplimiento de las directrices del rector Dr. Eduardo Flores Castro. Esta acción se enmarca dentro de un llamado a presentar propuestas de proyectos destinados a las comunidades cercanas a la mina, hecho por el propio rector.

Las reuniones presenciales, fundamentales para la planificación de esta jornada, tuvieron lugar en las instalaciones de la Universidad del Trabajo y la Tercera Edad (UTTE) de Coclé, «Olmedo Domingo Oberto», bajo la dirección de Enedina Del C. Villarreal Aranda, y con la presencia de líderes comunitarios y miembros del Comité de Apoyo a Comunidades Campesinas.

Entre los asistentes se destacaron representantes de diversas comunidades, como Monte Virgen Donoso, Belencillo Arriba, Nueva Lucha Donoso, Jade Beri, Nuevo Edén, Palmilla, San Benito, Sinaí y Nueva Esperanza.

La reunión contó con la valiosa participación del Licenciado Milton Martínez, sociólogo, quien compartió información histórico-geográfica relevante sobre el área de Donoso. Asimismo, el Profesor Fernando De Pasquale, director de DIGITE, expresó el respaldo que la Universidad de Panamá puede brindar a nivel nacional.

El transporte necesario para la movilización fue facilitado por la Extensión de Aguadulce, a través de la profesora Narcisa Jaén.

Durante el encuentro, los líderes campesinos y Ngäbe-Buglé expusieron la difícil situación que atraviesan, incluyendo los impactos negativos de la extracción minera en su entorno.

Entre las problemáticas mencionadas se encuentran niveles alarmantes de contaminación en ríos, suelos y aire, así como la falta de acceso a caminos adecuados debido a la exclusividad de la carretera construida por la empresa minera. Además, se destacó la escasez de empleo local en la mina y la violación de derechos fundamentales, como el libre tránsito por el área.

Frente a estas preocupaciones, se acordó iniciar acciones concretas, entre las que se incluyó el envío de un equipo técnico para realizar un diagnóstico inicial sobre la contaminación del suelo y las aguas superficiales en la zona.

Este primer paso permitió a la Universidad de Panamá comprender mejor la situación y proponer proyectos que aborden las necesidades de la comunidad de San Benito y sus alrededores.