Con la participación de 96 estudiantes de las escuelas Fe y Alegría y Dr. Justo Arosemena, ubicadas en los corregimientos de Curundú y Santa Ana, la Universidad de Panamá celebró la clausura del Proyecto de Valores.

Este evento se llevó a cabo en el Cine Universitario como parte de una iniciativa liderada por la Dirección de Servicio Comunal de la Vicerrectoría de Extensión de la universidad, destinada a inculcar valores en niños de comunidades vulnerables.

Raúl Carranza, director de Servicio Comunal, resaltó el compromiso de la Universidad de Panamá con su Plan de Desarrollo Institucional y el Eje 8, que promueve la relación entre la academia y la comunidad. «Nuestra dirección tiene la función de integrarse en las comunidades, apoyando programas organizados tanto por entidades de base comunitaria como por el gobierno nacional.

En este caso, trabajamos junto a la Dirección de Salud del corregimiento de Santa Ana para establecer proyectos enfocados en fomentar valores entre los niños.

Es en la infancia donde comienza el verdadero cambio en la sociedad, y nuestra labor se orienta a cultivar estos valores desde la base», destacó Carranza.

Josué Montenegro y Zulimar Córdoba, de cuarto grado en la escuela Fe y Alegría, y Alexia Vásquez y Leonardo Espinoza, de sexto grado en la escuela Dr. Justo Arosemena, comentaron que el aprendizaje de valores ha influido positivamente en su entorno familiar y escolar. «Desde que aplicamos lo que aprendemos aquí, vemos cambios en nuestras vidas», coincidieron.

Héctor Osorio, coordinador del Proyecto de Valores de la Dirección de Servicio Comunal, enfatizó que el programa está diseñado para brindar a los niños orientación y habilidades para la vida mediante actividades recreativas, como el cine y el deporte.

«Este año atendimos a 130 niños, y la proyección que hicimos en el Cine Universitario les mostró una película que refuerza los valores que enseñamos.

Para el próximo año, queremos expandir esta iniciativa a otras escuelas en comunidades vulnerables, como la escuela Amador Guerrero en El Chorrillo y la escuela de México en San Felipe», señaló Osorio.

En el desarrollo de este proyecto participan también profesionales como Kenia Candelaria y Danesca Berry, quienes aportan en las áreas de orientación y desarrollo comunitario. «Es una oportunidad invaluable que nos brinda el profesor Carranza para responder como universidad a las necesidades de nuestras comunidades», concluyó Osorio.

La Universidad de Panamá reafirma así su compromiso de generar un impacto social positivo, fomentando una sociedad más justa y solidaria desde la formación de valores en las generaciones más jóvenes.

Por: Alfredo Meléndez Moulton.

Foto: Madelyne Diaz