En un evento trascendental, el rector de la Universidad de Panamá, Dr. Eduardo Flores Castro, y la ministra de la Mujer, Niurka Palacios Urriola, firmaron un convenio marco de cooperación destinado a fortalecer la promoción académica, el desarrollo del talento humano y la formación profesional con un enfoque en los derechos humanos, especialmente los derechos de la mujer.

El acuerdo busca establecer una alianza estratégica a largo plazo entre ambas instituciones, con miras a generar, intercambiar y transferir conocimientos y tecnologías que apoyen el desarrollo institucional y promuevan una sociedad más equitativa y libre de violencia.

Un compromiso compartido

La vicerrectora de Asuntos Estudiantiles, Mayanin Rodríguez, expresó su satisfacción y compromiso con la firma del convenio. “Esto es más que un logro, es una responsabilidad social para nuestra universidad. Gracias al apoyo decidido del señor Rector, hoy concretamos esta alianza que abrirá puertas para iniciativas transformadoras en temas relacionados con la mujer y la violencia de género”, destacó Rodríguez, subrayando la importancia de trabajar de manera conjunta con el Ministerio de la Mujer.

Por su parte, la ministra Niurka Palacios enfatizó la relevancia de esta colaboración para abordar problemáticas como la violencia y el acoso hacia las mujeres, fenómenos que, según señaló, ocurren con mayor frecuencia de lo que se percibe. “Este convenio es un paso clave en nuestra misión de prevenir la violencia, garantizar el acceso a la justicia y fortalecer los derechos humanos. Con esta alianza, capacitaremos a personal y estudiantes para avanzar hacia un Panamá libre de violencia, promoviendo espacios seguros y equitativos en todos los ámbitos”, afirmó la ministra.

El papel transformador de la academia

El Dr. Eduardo Flores Castro, rector de la Universidad de Panamá, destacó el rol de la educación en la erradicación de conductas normalizadas que perpetúan la violencia. “Nuestra sociedad ha cambiado, pero necesita avanzar aún más.

Este convenio nos permitirá implementar conferencias, seminarios y diplomados que promuevan una nueva cultura de respeto y equidad desde las aulas y los hogares”, afirmó.

Flores también recordó cómo, en años pasados, prácticas y contenidos culturales, como canciones que romantizaban la violencia, eran aceptados socialmente.

Hoy, gracias a cambios significativos, estos contenidos son rechazados, pero queda mucho por hacer. “La educación es el camino para transformar mentalidades y construir una sociedad que valore la dignidad humana por encima de todo”, añadió el rector.

Una alianza con visión de futuro

El convenio contempla acciones concretas como la capacitación de personal docente y administrativo, la asistencia a víctimas de violencia, y la incorporación de temáticas de derechos humanos y género en los programas académicos. Además, se implementarán planes de monitoreo, prevención y tratamiento, destinados a garantizar espacios seguros dentro y fuera de las aulas.

Esta alianza estratégica representa un paso firme hacia la construcción de un Panamá más justo e inclusivo, donde hombres y mujeres, como futuros líderes del país, se formen bajo principios de igualdad y respeto.

La ocasion fue propicia para que las autoridades reunidades hicieran el encendido en el vestibulo de la rectoria del arbol que simboliza el rechazo a la violencia de género.

Por: Alfredo Meléndez Moulton.

Foto: Fran Perea.