A pocos meses de cumplirse dos años de la sanción de la Ley de Política Agroalimentaria de Estado (PADE), el decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de Panamá, profesor Eldis Barnes M., alzó su voz para exigir la implementación efectiva de esta norma que, según sus palabras, “no se le ha puesto cariño” ni se le ha dado la oportunidad de demostrar su impacto en el sector agropecuario del país.

La Ley PADE fue sancionada por el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, el 18 de enero de 2023, durante la feria de San Sebastián en el distrito de Ocú, provincia de Herrera.

Esta normativa tiene como objetivo brindar seguridad a la producción agropecuaria nacional, estableciendo lineamientos que promueven la equidad, sostenibilidad, soberanía alimentaria, competitividad y seguridad jurídica en el campo panameño.

Esta legislación contempla un enfoque inclusivo, territorial y orientado al desarrollo rural, integrando acciones intersectoriales que permitirían producir alimentos en cantidad y calidad, accesibles para el consumidor y a lo largo de toda la cadena de valor.

Barnes destacó que “Nosotros hemos insistido más de una vez. Yo he tenido la oportunidad de hablar con el viceministro, incluso con el ministro en la Asamblea. Siempre que tomamos la palabra, recordamos que hay una ley que debe implementarse”, expresó el decano.

También subrayó que la PADE contempla de forma detallada aspectos fundamentales como la educación agropecuaria, articulando todos los sectores involucrados en la producción nacional. “La ley está bien desarrollada. Lo que necesitamos es implementarla para luego evaluarla y ver qué funciona y qué debe mejorarse”, indicó.

Barnes lamentó que el sector agropecuario se mantenga disperso y fragmentado, lo que, a su juicio, ha debilitado su capacidad de incidencia ante los gobiernos. “Quisiéramos que el sector agropecuario fuera como la CAPAC o la Cámara de Comercio: un solo organismo, un solo puño cerrado.

Aquí estamos divididos, y los gobiernos —no solo este— suelen fraccionar las organizaciones, resolviendo problemas parcialmente”, advirtió.

Finalmente, hizo un llamado a la unidad entre productores, gremios, académicos y profesionales para lograr el desarrollo integral del sector agropecuario y del campo panameño, y reiteró que sin la implementación de la Ley PADE, no se podrá medir ni su efectividad ni su impacto real en la vida rural del país.

Por: Alfredo Meléndez Moulton.

Foto: Félix Villarreal.

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