El distrito de Soná es una de las divisiones que conforma la provincia de Veraguas. Está compuesto por doce corregimientos con una población de 29 mil 836 habitantes según censo del 2018, y se distingue por tener una producción agropecuaria como una de su principal actividad económica en la región, donde también el turismo poco a poco se abre paso.

En este importante distrito de Veraguas, un 19 de junio del año 2015, el periódico El Siglo resaltaba en uno de sus titulares: “Sonaeños exigen una extensión universitaria”. La razón fundamental en aquel momento era que cientos de jóvenes, residentes de diversas comunidades del distrito de Soná, hacían un llamado a las autoridades y a su vez exigían la construcción de una extensión universitaria en esa apartada región del país.

Jóvenes humildes y luchadores, pero con muchos deseos de superación académica en esa región y escasos recursos económicos, manifestaban en ese momento que les era imposible costear los costos diarios para viajar hasta el centro Regional Universitario de Santiago a recibir sus clases; y a razón de ello, asistían a adquirir sus clases en un viejo edificio prestado y perteneciente a la municipalidad, mismo que una vez fue el hospital del sector, y en el que les permitirían recibir  clases hasta el 31 de julio de ese año 2015.

Aquel llamado y petición hecho por los estudiantes, respaldados por los pobladores de la región, llevó a las autoridades universitarias a asumir el compromiso de encontrarle solución y respuestas a aquellos jóvenes deseosos de superación; y de esta forma, poder construirles un complejo universitario en condiciones adecuadas para que pudiesen adquirir conocimientos, convivir e interactuar en ese proceso académico de enseñanza aprendizaje a nivel superior.

Dos años después de aquel llamado que hizo eco en aquel distrito veragüense y también en las autoridades universitarias, se convirtió en un gran logro y una realidad aquel 24 de julio del año 2017; que con un costo de un 1 millón 200 mil dólares y sobre un terreno de tres hectáreas, donado por el empresario Guido Martinelli a la Universidad de Panamá, el rector Eduardo Flores Castro inauguró la nueva instalación académica de la Extensión Universitaria de Soná (EXUS), que quedaría adscrita al Centro Regional Universitario de Veraguas.

Aquella nueva sede académica de EXUS, se abría paso en el distrito con unos trescientos estudiantes, cinco facultades y once carreras a ofertar a nivel universitario; aportando con ello un positivo avance en el aspecto académico, cultural, económico y social para esa región luchadora y deseosa de superación académica y profesional.

La Extensión Universitaria de Soná, pese a algunos obstáculos y adversidades en su evolución, hoy refleja positivamente ese importante avance académico y de calidad, ya que a la fecha ha graduado más de seiscientos profesionales en el campo de las humanidades, el inglés, administración de empresas y en educación media diversificada, siempre dispuestos a responder a las necesidades educativas de la región, en el mercado laboral público y privado del país.

Es importante resaltar que la creación de la Extensión de Soná se deliberó y aprobó en Reunión Extraordinaria del 20 de diciembre de 2004, a través de la Resolución No 52-04 del Consejo General Universitario. Esta extensión académica inició labores administrativas un 17 de enero y dio inicio a su primer año académico el 28 de marzo del año en curso 2005 en las aulas del Colegio José Bonifacio Alvarado; años después, pasó a ocupar las infraestructuras del viejo edificio donde una vez funcionó el hospital Dr. Ezequiel Abadía de Soná, hasta julio del 2015.

Texto y Foto: Félix E. Villarreal V.