En el estacionamiento ubicado frente al edificio de la Colina, en el campus Octavio Méndez Pereira de la Universidad de Panamá, se eleva un busto con la figura de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Ponte y Palacios Blancomejor conocido en la historia como Simón Bolívar.

Se trata de una majestuosa obra trabajada en la técnica del bronce por las manos de quien en vida fue el escultor italiano Julio Roversi, radicado en Venezuela, país en el que dejó marcada su huella con majestuosas obras como el Cenotafio de Francisco de Miranda y José Gregorio Monagas, hoy patrimonio de ese país hermano.

Simón Bolívar, denominado por sus hechos y por la historia como El Libertador, ya que dedicó toda su vida a luchar por la emancipación de los países sudamericanos, fue el principal artífice e impulsor de la creación de esa “Gran Colombia” que en su momento integró a diversos países de América Latina, incluido nuestro Istmo panameño, luego de su independencia de España en 1821.

Bolívar, hombre incansable en su lucha y con la intención de asegurar la articulación de “Las Naciones Hispanoamericanas”, apegado a ese gran sueño de lograr la unidad en Latinoamericana como una sola nación realmente pluralista y democrática lo reflejó en aquel manuscrito conocido como la Carta de Jamaica, redactada por su puño y letra, en Kingston, aquel 6 de septiembre de 1815, en la cual describió lo siguiente: “Es una idea grandiosa pretender formar de todo el Nuevo Mundo en una sola nación con un solo vínculo que ligue sus partes entre sí y con el todo. Ya que tiene su origen, una lengua, unas costumbres y una religión, debería, por consiguiente, tener un solo gobierno que confederase los diferentes estados que hayan de formarse (…)

En definitiva, el libertador, en esa búsqueda de aquella gran unidad latinoamericana como una sola nación, siempre consideró a nuestro país como parte estratégica y territorial para lograr ese gran sueño que, en aquella misma carta de Jamaica, cuando acto seguido en sus líneas expresó: ¡Qué bello sería que el Istmo de Panamá fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos! Ojalá que algún día tengamos la fortuna de instalar allí un augusto congreso de los representantes de las repúblicas, reinos e imperios a tratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y de la guerra, con las naciones de las otras tres partes del mundo. Esta especie de corporación podrá tener lugar en alguna época dichosa de nuestra regeneración…»  

Once años después de lo plasmado en aquella Carta de Jamaica, un 22 de junio de 1826, Simón Bolívar logró que se instalara en nuestro Istmo, el Congreso Anfictiónico de Panamá, inspirado en aquella Liga Anfictiónica Délfica de la antigua Grecia que reunía a los doce pueblos en el santuario de Deméter en Antela, cercano al Istmo de Corintio.  Con esto, el Libertador, hizo tangible aquel sueño de unidad Latinoamericana y apuntó a crear la desde México hasta Chile y Argentina, lo que él denominó como la Confederación de los pueblos latinoamericanos, ubicando al Istmo de Panamá como el “Corintio” para iniciar aquel gran debate entre naciones.

De ese histórico encuentro, es importante señalar que salvo el caso de (Cuba y Puerto Rico), aquel Congreso Anfictiónico contó con la asistencia de Nueva Granada, Venezuela y Ecuador; como los países denominados  “gran colombianos” Guatemala, México y Perú, las Provincias Unidas de Centro América, Chile, Paraguay, Brasil y las provincias unidas del Río de la Plata (hoy Argentina y Uruguay) y Gran Bretaña que envió un observador, fueron los países que se dieron cita en nuestro territorio panameño, dispuestas a debatir en torno a la delimitación de las fronteras a partir de la división territorial de 1810, la abolición de la esclavitud, la creación de un tratado de comercio interno, la liberación de Cuba y Puerto Rico que se encontraban bajo el dominio español y la posibilidad de unificar todas las fuerzas en defensa de las soberanías en Latinoamérica.

Aunque los resultados de ese gran debate internacional no fueron los esperados por Simón Bolívar, a razón que la mayoría de los Estados participantes no se encontraban en las condiciones políticas y económicas adecuadas para cumplir con todos los compromisos y acuerdos debatidos; también estuvo la resistencia permanente de Estados Unidos y sus aliados afines de clase dominantes, que desde ese entonces se oponían a la materialización de aquel sueño de Unidad Latinoamericana planteado por Bolívar.

Para este año 2024, el 22 de junio específicamente, se cumplirán 198 años de aquel Congreso Anfictiónico de Panamá y no cabe duda que nuestro Panamá históricamente, por su condición geográfica y de país de tránsito, se convirtió tempranamente en un punto de encuentro de culturas provenientes de todo el mundo, y ha sido hasta la actualidad el “corintio” permanente de grandes debates y encuentros de solidaridad internacional; y en ese contexto histórico, la Universidad de Panamá como epicentro de los grandes debates, del pensamiento crítico y conciencia crítica de la nación a lo largo de sus 89 años de existir, ha sido un espacio abierto para el debate de las ideas.

En ese sentido, vale recordar que, para abril del 2015, en el marco de lo que fue la “Cumbre de Jefes de Estados” en nuestro país; los pueblos de Latinoamérica, inspirados en ese gran sueño del Libertador Simón Bolívar, se auto convocaron en nuestro Istmo una vez más para realizar lo que fue la “Cumbre de Los Pueblos Sindical y de los Movimientos Sociales”. Este importante evento, tuvo como sede la Universidad de Panamá y reunió a más 3,500 delegados/as representando a académicos, intelectuales a organizaciones obreras, sindicales, campesinas, pueblos originarios, estudiantiles, de mujeres, sociales y del movimiento popular de todo el Continente Americano que, al calor de los debates y encuentros artísticos, deportivos y culturales, se hizo evidente esa solidaridad y unidad latinoamericana.

Asimismo, es importante resaltar que la historia y figura del libertador en sí es parte de la Universidad de Panamá ya que en junio de 1978, en conmemoración del sesquicentenario del Congreso Anfictiónico de Panamá, abre sus puertas al público la Biblioteca Interamericana Simón Bolívar, hoyun importantereferente de la investigación académica y de universidades a nivel internacional, instancia que en octubre del 2023 fue reconocida como la primera entidad certificada, acreditada y autorizada bajo el Tratado de Marrakech en la República de Panamá.

Texto y Foto: Félix Villarreal V.

Deja un comentario

Crea una web o blog en WordPress.com